Enrique Pérez Viguera, subdelegado del Gobierno en Huelva, se muestra dispuesto a reunirse con los representantes de los clubes deportivos de la provincia para aclararles la entrada en vigor de una normativa relativa al voluntariado en el deporte de base; concretamente, a la polémica generada por el encuadramiento en el campo de la aplicación de la Seguridad Social de la actividad que se desarrolla en clubes y entidades deportivas sin ánimo de lucro. "Se están contando muchas falsedades sobre el contrato de voluntariado. No hay intención de meter a todo el mundo en la Seguridad Social ni de incrementar las inspecciones", asegura.  
 
Vicente Zarza, delegado de Educación Cultura y Deporte, aclara que el debate que se ha generado no tiene nada que ver con la nueva Ley del Deporte, "que es andaluza y está en fase de tramitación. Es por unas interpretaciones del cumplimiento del informe elaborado por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social y el Ministerio de Educación, Cultura y Deportes en referencia a unas inspecciones de la situación contractual de los clubes y asociaciones deportivas sin ánimo de lucro". Zarza apunta a que en muchos casos estos colectivos funcionan "gracias a que hay personas que o bien no cobran nada o simplemente una ridiculez como una compensación al transporte ya que, por ejemplo, tienen que trasladar a un equipo a jugar a un municipio. Con estas medidas de inspección se ven abocados a la regularización laboral, lo cual es una barbaridad porque lo que percibe esa persona no es un ingreso sino una compensación por el gasto".  
 
A su juicio, con esa norma "se va a destrozar el deporte de base y a producir un enorme daño en el tejido asociativo. Puede ser la muerte de muchos clubes y asociaciones deportivas en Huelva".  
 
Además critica otras decisiones del Gobierno central que, a su juicio, perjudican al deporte andaluz como "la subida del IVA del 8 al 21% por el uso de las instalaciones deportivas o la imposición de la licencia deportiva única, que tiene como objetivo dotar de mayores recursos a las federaciones españolas y puede provocar la desaparición de muchas andaluzas".  
 
El delegado aclara que, hasta el momento, en Huelva no se ha producido ninguna inspección deportiva pero comenta que existe un grave problema añadido. "Sé que sí las ha habido en otras provincias y la sanción es con carácter retroactivo de cinco años. La gente está asustada con este asunto porque puede traducirse en la obligación de afiliación a la Seguridad Social y abonar las correspondientes cotizaciones, tanto por parte de los clubes deportivos de base como de sus deportistas, entrenadores, técnicos, masajistas o preparadores físicos. Estas medidas se tendrán que cumplir no sólo en los casos en que la retribución sea igual o superior al salario mínimo interprofesional, sino también cuando exista una retribución que no alcance el salario mínimo".  
 
Pérez Viguera asegura que no es cierto y tranquiliza a los responsables deportivos onubenses. "La Ley 14/2013 de 27 de septiembre de apoyo a los emprendedores y su internacionalización no pretende acabar con el deporte de base. En su disposición adicional decimosexta dice textualmente que en el plazo de cuatro meses meses desde la aprobación de la presente ley, el Gobierno procederá a realizar un estudio de la naturaleza de la relación jurídica y en su caso, encuadramiento en el campo de aplicación de la Seguridad Social de la actividad desarrollada en clubes y entidades deportivas sin ánimo de lucro que pueda considerarse marginal y no constitutivo de medio fundamental de vida".  
 
"A partir de ahí el Consejo Superior de Deportes (CSD), con el Ministerio de Empleo y el de Educación, se ponen a elaborar el informe en el que participan tanto el CSD como la Inspección de Trabajo y Seguridad Social y la Tesorería General de la Seguridad Social para configurar el modelo. En eso no hay nada nuevo ni puede haber nada nuevo. Lo que hay es la complejidad del ámbito deportivo porque hay que proteger los derechos de los que sean auténticamente trabajadores. Pero de ahí a decir que todos los clubes van a tener que dar de alta a sus voluntarios me parece una barbaridad".  
 
Pérez Viguera, que es inspector de trabajo de profesión, recalca que "en primer lugar no todos los voluntarios reciben retribución y en la mayoría de los casos lo que perciben es una compensación de gastos. Por ejemplo, si un club va a jugar a San Bartolomé de la Torre le pagan una dieta y el kilometraje. Ojo, digo compensación de gastos, no una cantidad enorme. Si hay alguien en el club que todos los meses percibe 3.000 euros eso no es una compensación de gastos, es claramente una retribución".  
 
El subdelegado aclara cuáles son las características fundamentales del que está considerado trabajador para el club, "las que dice el Estatuto de los Trabajadores: retribución, dependencia y ajeneidad. Lo demás podrán ser voluntarios con compensación de gastos y algunos trabajadores a tiempo parcial. Es decir si yo tengo una retribución y le dedico al club en lugar de ocho horas cuatro, el club me da de alta con un contrato a tiempo parcial. Pero en ningún caso se pretende ni un incremento de las inspecciones ni aflorar nada oculto ni acabar con los clubes de base ni con los voluntarios. Es más, ese informe se ha elevado ya al Congreso de los Diputados en cumplimiento de la ley".  
 
El subdelegado agrega que "el CSD y el Ministerio de Empleo han elaborado un modelo de acuerdo tipo que puede servir de base para aquellos voluntarios que quieran utilizarlo. Ojo, el modelo no supone ni relación laboral ni no relación laboral. Es decir, no porque uno suscriba el modelo de voluntario va a quedar excluido de la Seguridad Social y ya no va a poder reclamar contra el club en algunos casos, y no porque uno esté diciendo que mi contrato es laboral va a dejar de ser voluntario".  
 
Pérez Viguera añade que los clubes onubenses pueden acogerse a un acuerdo con sus colaboradores que clarifica la relación entre ambas partes. También destaca que "no es obligatorio firmar el acuerdo de voluntariado, sino opcional. Es un instrumento que da seguridad a la relación con un voluntario. Si no hay acuerdo de voluntariado la relación podría encuadrarse en lo que el Estatuto de los Trabajadores denomina trabajos amistosos, benévolos o de buena voluntad. Ahora bien, ese trabajo amistoso tiene más dificultades probatorias que el acuerdo de voluntariado que permite tener documentada esa voluntad de colaboración altruista".  
 
Pérez Viguera insiste en que "no va a haber un incremento de inspecciones. Es más, el 90% de las inspecciones en el ámbito del deporte se producen a petición de, entre comillas, un trabajador de un club que dice: 'A mí no me han dado de alta'. ¿Y cuándo se produce eso? Generalmente cuando hay una ruptura. Y sólo el 20% de esas inspecciones -precisa- resultan auténticas".  
 
El subdelegado del Gobierno enfatiza que el documento que ha generado tanta polémica "está colgado en la página web del Consejo Superior de Deportes. Allí están todos los datos, explica cómo y porqué se hace".  
 
Pérez Viguera reitera su disposición a reunirse con los directivos de los clubes deportivos de la provincia para aclarar cualquier duda sobre este asunto. "A mí nadie me ha pedido una cita. Ha habido mucha desinformación y falsedades. Estaría encantado de reunirme con quien lo solicite", concluye.