El deporte del oval no deja a nadie indiferente, bien por su espectacularidad en la ejecución, bien por los valores que defiende o incluso por el ambiente que consigue crear ante ojos ajenos, una familia que siempre acompaña a este deporte y que provoca que la rivalidad sea secundaria y únicamente válida en los minutos que el cronómetro ejecuta. 
 
Esto fue lo que vivió nuevamente – y ya van cuatro años consecutivos – la playa de la canaleta en Punta Umbría, capital del rugby provincial con la celebración de la cuarta edición del Torneo de Rugby Playa Punta Umbría, organizado por el Club de Rugby Tartessos de Huelva en colaboración con el ayuntamiento de la localidad y el Mosquito Club en el que propios y extraños tuvieron la ocasión de disfrutar de una jornada deportiva cargada de espectacularidad, clase y entretenimiento, de conocer y disfrutar este deporte y de adentrarse en el mundo del rugby; una jornada que solo se vio truncada por la incongruencia puntual y vergonzosa de algunos jugadores que sin embargó no emborronó el ambiente lúdico de la concentración. 
 
Más de 150 jugadores se dieron cita en la mañana del sábado repartidos en los dos grupos que conformaron la modalidad masculina formada por Bacalarians, Utrera, CAR Cáceres, Romanticans y San Jerónimo en el A y Mezquita de Córdoba, Gourmet, Mairena, Recreativo Bifesa Tartessos y Loja en el cuadro B; además de las Cocodrilas de Sevilla, Tartessas de Huelva, Utrera y Bucaneras que integraron la competición femenina del torneo. 
 
La competición arrancó a las 10,30h de la mañana cuando el omnipresente Sol comenzaba a hacer acto de presencia y los primeros aficionados se iban asentando en las gradas - las cuales llegaron a su límite cuando el torneo llegaba a las finales – para seguir los primeros encuentros que iban sucediéndose entre los dos campos instalados en la costa puntaumbrieña. 
 
Desde los primeros minutos sorprendió la igualdad ofrecida en ambos grupos, si bien la superioridad teórica de algunos conjuntos era indiscutible, sobre la cálida arena amigos y rivales sufrían por imponerse en el marcador de forma que la sorpresa llegaba donde menos lógica planteaba. En el grupo A, los Gourmet - integrados por jugadores hispalenses de las primeras categorías nacionales – y Tartessos imponían su estilo y calidad; pese a ello Mairena, Loja y Mezquita no se lo pusieron fácil en ningún momento pues nadie quería adjudicarse la cuchara de madera, premio destinado en el mundo del rugby al equipo con ninguna victoria en su haber.  
 
En el grupo B dominado, esta vez sí, por el Bacalarians – formado por varios jugadores de división de honor – se repartían el resto de plazas entre Romanticans, San Jerónimo y Cáceres mientras que Utrera quedaba lejos de obtener una victoria. 
 
Por su parte, en la modalidad femenina linces y cocodrilas marcaban el ritmo de juego gracias al buen papel que alguna de sus integrantes marcaron durante todo el campeonato, ejerciendo un buen reflejo del fenomenal nivel que el rugby femenino viven en Andalucía. 
 
El ecuador del campeonato llegaba tras la final de la primera fase en la que Gourmet, Tartessos, Bacalarians y San Jerónimo lograban una plaza para Seminfinales de la Copa Oro mientras que Cáceres, Romanticans, Mairena y Loja hacían lo propia para la copa Bronce dejando el discutible premio de la Cuchara de Madera para el perdedor de los dos últimos clasificados, Mairena y Mezquita. 
 
Las semifinales arrancaron con dos bonitos enfrentamientos por un puesto en la Copa Bronce entre Cacéres y Loja, y Mairena y Romanticans. En el primero los extremeños, que este año disputarán la División de Honor B, no tuvieron rival ante un Loja que lo intentó hasta el último minuto pese a lo yermo de su esfuerzo, en el segundo encuentro los hispalenses apeaban a los Romanticans de Huelva en un partido vibrante de principio a fin. 
 
En el lado femenino Cocodrilas y Tartéssicas lograban derrocar a Utreranas y bucaneras, las primeras con gran facilidad y las segundas en un emocionante encuentro que se decidió en los últimos instantes; logrando sevillanas y onubenses acceder a la gran final. 
 
La emoción comenzaba a invadir los alrededores del recinto con el arranque de la primera sefinalde la Copa Oro entre Bacalarians y Recreativo Bifesa Tartessos. Ambos conjuntos, serios candidatos al título, se veían la cara sin que ninguno quisiese ceder un solo palmo de arena a su rival. No era ninguna broma, ambos contrincantes pelearon cada jugada y si bien los onubenses no lograron remontar el primer tanto de los hispalenses, la diferencia en el terreno no dejaba lugar a dudas que cualquiera podría hacerse con la victoria, la cual fue a parar a los visitantes tras un ensayo en el último minuto otorgándoles un 4 -3 definitivo. 
 
El espectáculo deportivo no podía ir mejor, con una grada repleta y un público y equipos entregados al bonito espectáculo que se estaba desarrollando sobre la ya única pista central en uso. Sin embargo, siempre hay un garbanzo negro hasta en los mejores restaurantes y este tuvo que salir a flote en una bochornosa jugada en la segunda semifinal lo cual originó la expulsión irrevocable de ambos equipos. Por manchar el nombre del rugby, algo muy grave en el mundo del oval. La competición continuó sin más sobresaltos pese a la irremediable modificación que sufrió el torneo y la final de la copa Bronce entre Cáceres y Mairena sirvió para recuperar la normalidad. 
 
En esta ocasión los extremeños no se dejaron amedrentar y lograron adjudicarse el tercer título masculino de la noche tras proclamarse campeón de la Copa Oro los jugadores del Bacalarians al no celebrarse la final, y campeón de la Plata los organizadores del Recreativo BIFESA Tartessos quienes igualmente no disputaron la final programada para los semifinalistas. 
 
El torneo acabó con la final, cargada de hermandad, amistad y buen juego entre Cocodrilas y Tartessas en la modalidad femenina, donde las hispalenses, referente en el rugby andaluz, se llevaron el título ante el aplauso de los cientos de aficionados allí dispuestos.  
 
La entrega de premios se realizó en el Mosquito Club momentos después donde los tres campeones recogieron sus respectivos trofeos además de la Cuchara de Madera que fue a parar a los cordobeses del Mezquita. Por su parte, el trofeo a los mejores jugadores fueron a parar al hispalense “Chino” del Bacalarians y Gema, jugadora de las Cocodrilas. 
 
La jornada concluyó con las palabras de los organizadores quienes agradecieron a los presentes, Ayuntamiento de Punta Umbría y patrocinadores su compromiso con el rugby y el deporte y emplazaron a los allí presentes a la quinta edición que desde este momento comienza de cara al verano de 2015.